Con esta receta de bizcocho de chocolate blanco te vas a chupar los dedos y vas a impresionar a todos en casa. Sea para darte un capricho porque te apetece o sea para hacer una tarta de cumpleaños vas a obtener un bizcocho esponjoso y muy suave. ¡Pruébalo!
Nivel de dificultad: Media
Tiempo: 1 h 30 min (30 min de preparación y 50 min de cocción)
Raciones: 8 personas
Cómo preparar un bizcocho de chocolate blanco
Ingredientes:
- 2 tabletas de chocolate blanco.
- 225 gr de harina.
- 225 gr de azúcar.
- 10 gr de levadura en polvo.
- 1 cucharadita de sal.
- 125 gr de mantequilla a temperatura ambiente.
- 1/2 cucharada de extracto de vainilla.
- 3 huevos medianos.
- 225 ml de leche.
- 80 gr de chocolate negro (para la cobertura).
Preparación:
- Precalentamos el horno a 180º.
- Batimos el azúcar y la mantequilla a temperatura ambiente hasta que forme una cremita.
- Añadimos los huevos y la esencia de vainilla sin parar de mezclar.
- Mezclamos la harina con la levadura y la pizca de sal y vamos añadiéndolo poco a poco junto con la leche.
- Fundimos el chocolate blanco de una tableta (puede ser en el microondas o al baño maría) y lo mezclamos con la masa del bizcocho.
- Engrasamos un molde de horno y la vertemos.
- Horneamos el bizcocho de chocolate blanco unos 50 minutos o hasta que pinchemos con un palillo y salga limpio (ya sabes, si sale «sucio» hay que dejarlo unos minutillos más).
- Lo dejamos enfriar en el horno mientras fundimos el chocolate blanco y el negro juntos para hacer la cobertura.
- Una vez lista la cobertura saca el bizcocho del horno y vierte el chocolate.
- Déjalo termina de enfriar ¡y a comer!
Consejos para un bizcocho perfecto
Puedes añadirle trocitos de fruta como pera o manzana para darle un toque especial.
Elige el tipo de harina y de azúcar que desees, la foto del bizcocho de esta receta lleva harina integral de trigo y azúcar moreno.
También puedes picar unas nueces o avellanas y ponerlo en la masa antes de hornearla.
En cuanto a la cobertura es personalizada, puede ser de dos tipos de chocolate o ser sólo chocolate blanco. O puedes ponerle mermelada de fresas, por ejemplo.
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